Nuevo estudio defiende que el vapeo ayuda a dejar de fumar

Existen defensores y detractores del vapeo desde que se inventasen los cigarrillos electrónicos como método para abandonar el pernicioso hábito de fumar cigarrillos tradicionales. El fenómeno del vapeo es relativamente reciente, y desde sus inicios, son muchos los estudios que se llevan realizando para tratar de arrojar luz sobre la utilidad de este método. A raíz de este tema han salido nuevos estudios que demuestran que el uso del cigarrillo electrónico ha de considerarse como la principal terapia de reemplazo de la nicotina y que es capaz de dar un alto porcentaje de éxito en sus usuarios.

Según se ha dado a conocer en un reciente estudio realizado por doctores del Harvard Medical School y del Hospital General de Massachusetts, el resultado de dicha investigación indica que aquellos fumadores que vapean con regularidad tienen muchas mayores posibilidades de dejar de fumar que aquellos que no vapean. De hecho, los fumadores que vapean a diario tienen un 77% más de posibilidades de dejarlo tras dos años sin haber vuelto a recaer.

Este estudio ha sido publicado online por el diario Nicotine and Tobacco Research. Cabe recalcar, además, que la autora principal, Sara Kalkhoran, es conocida por su meta-análisis de 2016,  del que fue coautora junto a Stanton Glantz, y que defendía que el vapeo reducía de manera fehaciente las tasas de fumadores que conseguían abandonar este hábito.

Los datos de este nuevo estudio han sido tomados de los primeros tres años del estudio Population Assessment of Tobacco and Health de la FDA (Administración de Alimentos y Fármacos de EE.UU.), y está basado en más de 8.000 fumadores. Los sujetos proporcionaron información personal sobre su salud y sus hábitos como fumadores, y posteriormente iban actualizando los datos tras el primer y el segundo año.

Este  nuevo estudio se suma a la creciente base que demuestra que los productos de vapeo ayudan a los fumadores a dejarlo. Los investigadores han encontrado que, al final del periodo del estudio de dos años, alguien que vapea todos los días es más probable que lo haya dejado que alguien que vapea de manera ocasional. Casi dos veces más de fumadores que vapeaban cada día (11%) fueron capaces de dejarlo comparado con el número de participantes que no vapeaban (6%). Personas que vapeaban pero no a diario mostraban también más probabilidades de haberlo dejado a la conclusión del estudio que aquellos que no utilizaban cigarrillos electrónicos.

Según comentó Kalkhoran: “Este hallazgo sugiere que los fumadores que utilizan cigarrillos electrónicos para dejar de fumar necesitan usarlos de manera habitual —todos los días— para  aprovechar al máximo la ayuda que estos productos pueden proporcionar”. El estudio defiende así mismo la idea de lo que llaman “abandono accidental”, un proceso bien conocido por los vapeadores, por el que los fumadores a los que también les gusta el vapeo, dan el paso a dejarlo completamente por razones que no tienen nada que ver con abandonar el hábito de de fumar de manera intencionada.

Este nuevo estudio sigue añadiendo pruebas que muestran que los productos del vapeo pueden ayudar a dejar de fumar. Un estudio publicado a principios del corriente año en el Diario de Medicina de Nueva Inglaterra (New England Journal of Medicine), mostraba que los cigarrillos electrónicos eran dos veces más efectivos que cualquier otro producto de terapia de reemplazo de nicotina para ayudar a dejar de fumar durante al menos un año.

Dejar de fumar es siempre una tarea difícil pero realmente importante  y se puede afirmar que los cigarrillos electrónicos pueden ayudar a cumplir la misión con la que fueron ideados: proporcionar a aquellas personas que desean dejar de fumar de un método para hacer esa transición, y ayudar a no recaer en el consumo de cigarrillos tradicionales. Sin duda una buena noticia para los vapeadores.