El vapeo en modo control de temperatura

Vapeo control temperatura

En multitud de ocasiones hemos oído hablar del modo control de temperatura o TC. Sabemos que hay muchos mods que disponen de esa opción pero, siendo sinceros, casi todo el mundo suele vapear en modo control de potencia, tal vez por su simplicidad o tal vez porque el tipo de resistencias que hacen falta para vapear en modo control de temperatura son menos comunes en el mercado. Al final es una opción que sabemos que está ahí pero que nunca utilizamos y de la que casi no sabemos nada y por eso no nos hemos preocupado nunca de saber más detalles sobre cómo funciona este tipo de vapeo. Por eso nos proponemos hoy arrojar un poco de luz sobre este tema: ¿Qué es el vapeo en modo Control de Temperatura?

El vapeo en modo control de temperatura es principalmente una solución tecnológica que evita esas indeseables caladas con sabor a quemado. También es capaz de proporcionar un vapeo constante mientras das una calada larga debido a que la temperatura se mantiene (en lugar de aumentar como ocurre con el vapeo en control de potencia). El usuario escoge el límite de temperatura (que suele estar entre los 100ºC y los 315ºC), y la potencia se ajusta automáticamente al llegar a la resistencia para mantenerla a la temperatura escogida.

Históricamente, los comienzos del modo control de temperatura se remontan a una empresa llamada Evolv que en 2014 creó su chip DNA. Incluso actualmente, mucha gente todavía considera los chip DNA como los mejores mods con control de temperatura del mercado. Cuando Evolv presentó la idea del control de temperatura en el vapeo fue algo revolucionario. La palabra “innovador” tal vez se suele usar con mucha ligereza pero, en este caso, sin duda lo fue. Antes de TC los mods solamente podían ajustar su potencia. Actualmente, igual que el control de potencia, el control de temperatura está presente en la mayoría de mods avanzados.

¿Cómo funciona el control de temperatura?

Usar el control de temperatura es algo sencillo aunque no sepas nada sobre su funcionamiento interno. Básicamente, el metal de ciertas resistencias aumenta su ohmiaje según se va calentando. Si has vapeado alguna vez, seguramente ya sabes lo que es el ohmniaje y que en los mods suele aparecer en la pantalla con el signo “Ω”. No obstante, cuando vapeas con resistencias de kanthal (que son las más comunes), el valor del ohmniaje no cambia. Esta es una de las particularidades de este material, que su ohmniaje no cambia independientemente de la temperatura.

Para el vapeo en modo TC se debe utilizar un tipo de hilo que aumenta la resistencia según aumenta la temperatura. El mod comprueba el ohmniaje de la resistencia a temperatura ambiente, después continúa comprobándolo según vamos vapeando. El cambio de ohmniaje pasa a convertirse en un aumento de temperatura y el mod ajusta la potencia para mantener la temperatura que deseamos. El sistema sería comparable al que utiliza un coche con el control de crucero, en el que marcamos una velocidad y es el propio coche el que ajusta la potencia que necesita el motor para mantener esa velocidad ya estemos en cuesta o en llano.

Qué necesitas saber para vapear en modo Control de Temperatura

Lo primero y principal, tener un mod que te permita el vapeo en control de temperatura. Habitualmente aparecerán las siglas TC en el nombre del mod o en las características. Suele haber diferencias también entre los dispositivos, y algunos tienen características más avanzadas que otros, lo que se traduce en que algunos mods consiguen un mejor rendimiento que otros funcionando en modo TC.

Algunas empresas tienen una buena reputación respecto al rendimiento que ofrecen con esta característica. Empresas que han demostrado haber realizado un buen trabajo y haber conseguido un gran rendimiento en este tipo de mods podrían ser, entre otras, Aspire o Vaporesso.

Tipos de hilo para el vapeo en TC

Existen cuatro tipos de hilo principales que se utilizan para el vapeo en control de temperatura: el níquel 200, el titanio, el acero inoxidable, y el níquel ferroso.

El níquel 200, conocido habitualmente como Ni200, fue uno de los primeros en utilizarse para este tipo de vapeo. Hoy en día no es tan común debido a que hay personas que pueden tener reacciones alérgicas a este material.

Titanio de grado 1, también conocido como Ti. Funciona muy bien en modo TC, pero el usuario debe de asegurarse de no sobrecalentarlo.

El acero inoxidable es un tipo de hilo muy popular y fácil de encontrar. Puede encontrarse en distintos grados: 304, 316, 316L, 317 y 430, aunque el más común suele ser el SS316L. Es el único hilo que puede utilizarse en ambos modos, control de temperatura y control de potencia.

Níquel ferroso, también conocido como NiFe, viene en distintos grados como 48, 30, 52 o 70. Normalmente no está muy disponible.

Cada uno de estos materiales tiene su propio coeficiente de temperatura de resistencia, que describe el cambio de resistencia de un objeto asociado a un determinado cambio de temperatura. Tu mod necesita conocer el TCR específico del hilo que estés usando para enviar la potencia correcta a la resistencia para limitar su temperatura. El ohmniaje de las resistencias para TC puede ser muy bajo y es algo muy a tener en cuenta. Cada material tiene un TCR distinto, por eso la mayoría de mods tienen ajustes para distintos valores de TCR para Ni200, Ti y SS (316L), que son los más populares.

Teniendo en cuenta que cada material tiene un TCR distinto y que los TCRs preestablecidos pueden resultar a veces dudosos, es muy práctica en todo mod TC la opción de TCR personalizable, que permitiría a todo tipo de resistencia para TC ser utilizada de manera más precisa. Comprueba las especificaciones de tu mod y busca que sea personalizable para que puedas ajustar el valor TCR dependiendo del tipo de metal y su grado.

¿Cómo se vapea en modo TC?

Lo primero, selecciona en tu mod el modo TC y escoge el tipo de resistencia que tengas. Si tu mod dispone de TCR puedes introducir el valor exacto de TCR. Después, asegúrate de que el mod y el tanque estén a temperatura ambiente para que las lecturas de temperatura sean lo más precisas posibles. La mejor forma de conseguir esto es no utilizar el mod al menos en los primeros 15 minutos antes de empezar a vapear.

Monta la resistencia de manera normal pero asegúrate de que esté bien apretada. En caso de las reparables, asegúrate de que estén ajustadas de manera firme. Después, enrosca el atomizador en el mod. Comprueba que el mod lee la resistencia de manera correcta y bloquea la resistencia (normalmente pulsando los botones “+” y “-”).

En caso de que estés utilizando un atomizador reparable, ten en cuenta que el acero inoxidable es el único material para TC al que se puede realizar un dry-burn en caso de necesitarlo, pero debes hacerlo a menos potencia que si lo hicieras con hilo de kanthal. No obstante, es recomendable no hacer dry-burn con este tipo de hilos resistivos.

Algunos mods con TC permiten cambiar la potencia además de la temperatura, aunque lo normal es que ajusten los vatios de manera automática. Si puedes ajustar la potencia y estás usando resistencias comerciales, ajusta la potencia y la temperatura a la recomendación mínima que suele venir impresa en la resistencia. Desde ahí puedes ir modificando para ajustarlo a tus preferencias.

Mejor rango de temperatura para el vapeo TC

Normalmente, los rangos de temperatura se mueven entre los 200ºC y los 250ºC (392-480ºF), y se suele mover en incrementos de 5ºC o 10ºF. Ajusta la temperatura que buscas. Por lo general, conseguirás enseguida un buen vapeo y podrás darle caladas largas sin miedo a que se sobrecaliente. Tiende a ser igual, excepto que cuando te quedas sin líquido notarás que el vapor pierde intensidad de manera notable.

Para ajustarlo, sube o baja la temperatura según lo veas necesario. Como en casi todo, el mejor punto suele ser algo subjetivo y depende de los gustos de cada persona.

Al vapear en modo TC, si notas sequedad cuando te queda poco líquido, puedes bajar la temperatura. Si tu mod te permite también controlar la potencia, puedes ajustarla también —ten en cuenta que este tipo de resistencias suelen tener un ohmniaje muy bajo y normalmente requieren cierta potencia para calentarlas de manera efectiva—.

¿Cuáles son las ventajas del control de temperatura?

La primera ventaja es, sin duda, la de evitar las horribles caladas con sabor a quemado. En modo TC, si el algodón se queda seco la temperatura aumenta, por lo que la protección de temperatura inmediatamente corta la potencia para compensar. Como resultado, en lugar de la horrible calada en seco lo que pasa es que sale menos vapor y enseguida nos daremos cuenta.

Al no sobrecalentar la resistencia no se chamusca el algodón, que es lo que habitualmente sabe tan mal. Las resistencias para TC duran más que las resistencias normales para usar en control de temperatura y el algodón dura también mucho más ya que no excede de la temperatura necesaria seleccionada para disfrutar de un buen vapeo.

Otra de las ventajas es la autonomía de la batería, gracias a que utiliza solamente la potencia necesaria para mantener la resistencia a determinada temperatura, vapear en modo TC utiliza menos potencia que el modo control de potencia, lo que permite que tu batería aguante más tiempo entre carga y carga.

Por último, otro de los puntos fuertes de este tipo de vapeo es su consistencia. Al tener el control sobre la temperatura, las caladas mantienen siempre una misma intensidad. En modo control de potencia, las caladas son más irregulares, ya que el calor de la resistencia cambia dependiendo de la longitud de cada calada. Eso está bien en caladas cortas, pero cuanto más larga sea la calada, más se calentará el vapor y la propia boquilla.

Desventajas del vapeo en modo TC

A veces, sobre todo para alguien que se está iniciando, puede ser algo complicado. En general, el modo potencia es más directo e intuitivo. Simplemente ajustas la potencia dentro del rango que te permita la resistencia y comienzas a vapear. El control de temperatura suele requerir algo más de ensayo-error antes de conseguir el vapeo que buscamos.

Hay que tener en cuenta que no todos los mods son buenos en este modo. De hecho, muchos de los mods más económicos no están diseñados específicamente para este tipo de vapeo y suelen tener ciertas limitaciones. Así que si te gusta este tipo de vapeo, asegúrate de encontrar el mod apropiado.

La limitación de los materiales. El kanthal es el hilo más común en el vapeo, seguido en los últimos años por el Ni80. Aunque el acero inoxidable sigue teniendo cierta popularidad, la mayoría de tanques no viene con resistencias preparadas para el vapeo en TC. Si quieres vapear en modo TC y no te gusta fabricarte tus propias resistencias, las opciones en el mercado que dispongan de este tipo de resistencias son bastante limitadas.

Conclusión

El vapeo en modo control de temperatura puede ser una experiencia verdaderamente increíble, gracias a esa consistencia de la que carecen otros modos de vapeo. A nadie le gustan las caladas con sabor a quemado o que la boquilla se caliente demasiado hasta el punto de quemarte los labios, cosa que no ocurre con el vapeo en TC. Aunque sigue siendo mucho menos popular que los mods normales con control de potencia, es un tipo de vapeo muy cómodo y práctico una vez que lo conoces. De hecho, incluso existen actualmente algunos pods que permiten este tipo de vapeo de manera automática. Tal vez, en el futuro sea una de esas características que encontraremos en todos los dispositivos.

Share:

Para entrar en Vapo.es es obligatorio ser mayor de edad
¿Tienes más de 18 años?